lunes, 12 de mayo de 2014

MUSICOTERAPIA

La Musicoterapia es la utilización de la música (melodía y/o ritmo) para provocar sensaciones, inducir el sosiego para ayudar al autocontrol y a la relajación, facilitar la relación con los demás, mejorar la autoestima, facilitar la adquisición de conocimientos… en definitiva: para provocar cambios y lograr mejoras físicas, emocionales, sociales y cognitivas.
El componente no verbal de la música ayuda a abrir nuevos canales de comunicación, algo especialmente importante en niños cuyo desarrollo lingüístico está bloqueado o deteriorado. En el colegio existe un colectivo de niños y niñas que, además de presentar dificultades lingüísticas y de aprendizaje, adolecen de falta de habilidades sociales o de insuficiente intencionalidad comunicativa para una correcta integración en el grupo de iguales que facilite su desarrollo global. Melodía y movimiento (danza, como interpretación corporal de la música), elementos universalmente disfrutados por los niños, aun relacionados con contenidos académicos, son una propuesta muy atractiva para el alumnado, al conseguirse una implicación y una motivación de esfuerzo que no se logra con actividades escolares tradicionales.

Desde el pasado curso 2012/13 se está llevando a cabo un Taller de Musicoterapia en el colegio, buscando la implicación del alumnado del Segundo y Tercer Ciclo para actuar como monitores auxiliares con niños y niñas atendidos por el equipo de Atención a la Diversidad.

En este tiempo ya se aprecian mejoras observables durante la sesión: se facilita la realización de conductas dirigidas a los otros en un contexto de juego (no juegos individualistas, sino que se produce una interacción necesaria), se eleva la autoestima por el bajo riesgo al intervenir (no sentirse ridiculizado en ningún momento), se aumenta la comunicación verbal y no verbal (por medio de diálogos con palabras, melodías o gestos), se facilitan las interacciones sociales con el grupo inmediato y con el gran grupo (primero con el grupo de Musicoterapia, pero llevando después las canciones al patio de recreo y al aula ordinaria), se aumenta la atención a través de la escucha sostenida (momentos de espera en melodías dialogadas), se facilita la adquisición de contenidos (esquema corporal, conceptos básicos…), se potencia la musculatura orofacial empleada en el habla (mediante juegos con música y ejercicios repetitivos pero divertidos)…



El grado de implicación de los niños y niñas mayores en una actividad de ayuda desinteresada está siendo muy alto, con detalles emocionantes en la relación entre grandes y pequeños. Esto tiene efectos positivos en el clima de convivencia del centro, visibles especialmente en los tiempos de recreo.

En el siguiente documento podemos apreciar algunos momentos de una sesión.